Tomógrafos de Coherencia

Los tomógrafos de coherencia óptica (OCT) representan una revolución en el diagnóstico por imágenes oftalmológicas, ya que permiten obtener cortes transversales de alta resolución de las estructuras oculares, en especial de la retina y el nervio óptico. Este tipo de tomografía no invasiva se basa en la interferometría de baja coherencia y es fundamental para la evaluación de patologías maculares como la degeneración macular relacionada con la edad (DMAE), edema macular, membranas epirretinianas y agujeros maculares. También se utiliza para el seguimiento del glaucoma, al medir con precisión el grosor de la capa de fibras nerviosas de la retina. Los OCT modernos, como el Cirrus HD-OCT de Zeiss o el Triton de Topcon, utilizan tecnología de barrido espectral (SD-OCT) o de barrido por fuente (Swept Source OCT), que ofrecen mayor velocidad y profundidad de escaneo. Estos equipos integran software de análisis comparativo, segmentación automática de capas retinianas y base de datos normativa. Son herramientas imprescindibles en clínicas oftalmológicas, centros quirúrgicos y hospitales de alta complejidad. Las tareas de mantenimiento incluyen calibración del escáner óptico, limpieza de espejos internos, y actualización del firmware. Fallas típicas pueden incluir errores de alineación del haz, problemas de conectividad con el software EMR o fallas en la fuente de luz infrarroja. En Santiago, los servicios técnicos especializados para tomógrafos de coherencia ofrecen diagnóstico avanzado, restauración de imágenes defectuosas, limpieza de lentes internas y soporte técnico para conectividad digital y actualización de módulos clínicos.